“Se está produciendo una transformación sectorial con importantes repercusiones tanto desde la perspectiva de la demanda de servicios de movilidad por parte de los clientes como de la oferta de los mismos por parte de las empresas del sector, las actuales, las recién llegadas y las que parece que quieren llegar”, explicó Ricardo Conesa, impulsor del “Think Tank Automoción B2B” de IE Business School y Director del Programa Avanzado en Dirección de Empresas del Automóvil de la escuela de negocios. Junto a él, José Luis Criado, Director Académico del posgrado en automoción de IE Business School y que co-lidera el Think Tank; Agustín García, presidente de la Asociación Española del Renting de Vehículos (AER) y Edwin Acosta, Regional Managing Director de Eurotaxx para España, Portugal e Italia.
“El sector parece
evolucionar desde un entorno fundamentalmente B2C a otro B2B. Esa es, al menos,
la tendencia que se ha puesto de manifiesto en las dos sesiones de trabajo
realizadas por el Think Tank con una veintena de profesionales de la automoción
que detentan importantes responsabilidades en la Administración, asociaciones
sectoriales y compañías fabricantes de vehículos, productoras de componentes,
petroleras, aseguradoras, firmas de renting, certificadoras, empresas de ITV o
redes de talleres”, añadió José Luis Criado.
Nuevos fenómenos
En los años 90 empresas,
entre otras, de transporte público, concesionarios de vehículos, talleres,
aseguradoras o financieras proveían de servicios de movilidad a las personas
que necesitaban desplazarse. Sin embargo, en un momento dado se producen una
serie de fenómenos que lo cambian todo: la presión medioambiental sobre el
automóvil, especialmente en ciudades; el incremento disuasorio de los costes de
posesión de un vehículo; el cambio de actitud de muchos jóvenes para los que el
coche deja de ser algo aspiracional; y la conectividad que se deriva de la
generalización de Internet y los smartphones. La principal consecuencia de
estos nuevos fenómenos es la aparición de un modelo de economía colaborativa y el auge del coche compartido.
Por su parte, las
empresas proveedoras de movilidad también tienen que hacer frente a nuevos
fenómenos que condicionan su actividad: el surgimiento de ventajas fiscales
para determinados tipos de uso del vehículo; el aumento del outsourcing por
parte de las empresas para poder concentrarse en el ‘core’ de su negocio; la
aparición de mayores riesgos en cuanto al valor residual del vehículo; o la
necesidad de las empresas de calcular el coste del uso de vehículos sin
imprevistos. Todo ello ha supuesto el desarrollo y consolidación de las
actividades de intermediación de flota que hacen compañías como las de renting.
La tesis defendida por el
“Think Tank Automoción B2B” de IE Business School es que “se está generando una
barrera entre los usuarios finales de los vehículos y servicios de movilidad, y
sus tradicionales proveedores”. En palabras de Conesa: “Surgen fenómenos como
Car2Go o Uber que contratan el vehículo que antes compraba al concesionario el
cliente final. Al mismo tiempo, por ejemplo, se consolidan modelos de negocio
como el de las compañías de renting que contratan el seguro o el taller que
garantiza la movilidad del vehículo que tú, como usuario final, tienen
contratado con esos intermediarios de flota”.
A partir de este
escenario, el “Think Tank” plantea en sus conclusiones que se producirán nuevos
fenómenos que conducirán a un sector de automoción más B2B. El futuro será,
cada vez más de los integradores de datos y de servicios. Así lo anticipan
diferentes fenómenos: el coche y el cliente conectado, el vehículo eléctrico,
el Big Data y el uso de esa información para generar ventajas concretas al
cliente del coche conectado; el coche autónomo; los servicios integrados, como
esas apps que nos resuelven en una sola solución todas las necesidades que
tenemos; o la evolución de la necesidad de ‘tener cosas’ a la de ‘hacer cosas’.
“Google o Amazon, por ejemplo, son consolidadores de Big Data, intermediadores,
barreras que aportan valores al usuario final y que permiten aventurar una
transformación del B2C al B2B en el sector de la distribución y mantenimiento
de vehículos”.
Para los participantes en
este Think Tank de Automoción B2B de IE Business School cada vez habrá más
intermediarios a la hora de elegir dónde llevar a mantener o reparar el
vehículo. Pero eso no significa que se vaya a convertir en el modelo
hegemónico. Con todo, esos “intermediarios” pedirán a los talleres el uso de
determinados sistemas informáticos de gestión para optimizar el proceso de
mantenimiento y reparación. Tanto en un caso como en el otro, se trate de un
cliente particular como de uno corporativo, CSS cuenta con la solucióntecnológica adecuada para ayudar a la empresa de reparación a optimizar susprocesos y hacerlos más eficientes y rentables.
Las nuevas tecnologías y formas de uso del vehículo obligan al taller a ser aún más eficiente