Por eso, es fundamental implementar procesos que lleven a que los talleres tengan una alta productividad que se traduzca, entre otras cosas, en menos tiempo para que el conductor vea reciba su vehículo reparado, más clientes, más ingresos y, en definitiva, mejores resultados.
De este modo, para aumentar su productividad, los talleres deben optimizar los recursos, teniendo en cuenta el más limitado de todos: el tiempo. Una variable que puede influir en que los talleres sean poco productivos y que puede estar motivada por multitud de factores (formación o disponibilidad del personal técnico, retraso en los recambios, averías en las herramientas o maquinaria utilizada…).
Cuatro estrategias clave
En este sentido, y para evitar pérdidas y mejorar el rendimiento de nuestro negocio de reparación de vehículos, es recomendable seguir cuatro estrategias claves:
Mayor eficiencia. Que nada sobre. Un taller no debe tener operarios sin trabajo a realizar y, por supuesto, tiene que contar con las herramientas necesarias. Además, es importante que los equipos utilizados estén calibrados y en óptimas condiciones, ya que el descuido obligará a repetir procesos o hará las operaciones más lentas.
Personal cualificado. Es fundamental que los técnicos reciban la mejor formación teórica y práctica posible tanto para atender los procesos como para hacer un uso correcto de las herramientas. Su desconocimiento genera procedimientos largos y con menores estándares de calidad.
Productividad sin sacrificar calidad. La preocupación por ahorrar o reducir costes puede llevar a que la calidad sea menor y a que se tengan que destinar recursos a repeticiones evitables. Por ejemplo, si en un proceso de pintura no se consigue un acabado perfecto, nos obligará a invertir tiempo y materiales en arreglos que terminan incrementando aumentando los costes del taller.
Estandarizar procesos. Muchos de los problemas generados en el taller, surgen por la falta de procesos estandarizados, una meta que se puede lograr con el uso de la tecnología. Y es que, cada técnico realiza las reparaciones tal y como aprendieron a hacerlo, lo que hace que los pasos adoptados por unos y otros sean diferentes. La recomendación es implementar estándares de calidad para que los procesos sigan secuencias determinadas, reduciendo los tiempos en cada intervención.
Herramientas digitales para ser más eficientes
Y para que el taller sea más eficiente, es fundamental contar con las mejores herramientas digitales de gestión en el taller, aquellas que nos permitan medir y monitorizar todas las áreas del negocio. Gracias a estas herramientas, tendremos a nuestra mano la trazabilidad de los procesos, las tareas y el desempeño de las personas del equipo del taller, lo que redunda en un mejor y mayor control de los trabajos y la organización del taller
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